Uno de los primeros pasos a tomar para que mejore el clima laboral dentro de una empresa, es promover el respeto entre empleados y gerentes. Por muy tensa que sea la situación la comunicación en el equipo debe ser cordial, que no brinde espacio al irrespeto o la excesiva confianza para poder dirigirse a los demás de manera descortés. Episodios donde este valor sea vulnerado puede afectar la armonía, la productividad y las relaciones interpersonales.
El respeto no solo garantiza que la comunicación fluya de manera adecuada y el clima laboral mejore, también incentiva a una comunicación reciproca entre los empleados y los jefes o líderes de grupo, garantizando también que cada uno de los miembro del equipo de trabajo se sienta como un profesional que no solo fue contratado para brindarle resultados a la empresa, sino que se sienta integrado y participe de un crecimiento o de un proyecto. Esto implica también que deben provocarse los escenarios para cada empleado sea escuchado.
Los momentos de desahogo de los empleados, aportan a un mejor clima laboral también desde el punto de vista de la identificación y pertenencia hacia la empresa. Es necesario que los líderes de equipo consigan que la actitud de los trabajadores vaya en consonancia con los valores que quiere proyectar la empresa y eso se logra fidelizándolos y haciendo que se sientan orgullosos de trabajar en un inmejorable ambiente laboral.
La valoración del empleado
La garantía de sentirse bien en el espacio laboral y generar un buen clima laboral se encuentra brindando las condiciones óptimas de trabajo a nivel estructural y tecnológico. El bienestar de los empleados y colaboradores incentiva la productividad, la eficiencia que solo puede lograrse suministrándoles equipos de alta calidad, mobiliario cómodo, duradero y que el espacio este acondicionado para desarrollar cualquier tarea sin obstáculos.
Mejorando sustancialmente el espacio de trabajo, la empresa verá que la productividad se incrementa y esto debe ser un indicativo para que los logros se celebren. El empleado como profesional busca ser valorado, independientemente de la tarea trazada, todo esfuerzo o meta alcanzada debe ser reconocida y en el mejor de los casos compensado económicamente. Los bonos por productividad puede traer más ganancias que perdidas para una nomina.
Y por último hay un aspecto que se les dificulta sustancialmente a las empresas y entender que los horarios muchas veces restan objetividad a la evaluación y desempeño de los trabajadores. Un buen clima laboral mejorará con creses cuando los líderes de las empresas estén dispuestos a entender que rígidas jornadas laborales tienden a ser menos eficientes a nivel de productividad. Cada ser es independiente en pensamiento y conocimiento, y no todos tienen la misma capacidad a las mismas horas. Flexibilizar las entradas y las salidas brindará mejores resultados para la empresa.