Blog

Los tipos de dependencia que debes conocer

Los tipos de dependencia que debes conocer

La profundización en estas leyes de protección y asistencia a las personas en situación de dependencia trajo consigo la puesta en marcha de los procesos de valoración que son tan importante para determinar los niveles y reconocer la discapacidad de un trabajador o de cualquier persona dentro de la sociedad. Estas valoraciones son realizadas a través de instrumentos de valoración dictaminados en la ley, donde se logra identificar con precisión tanto el grado de dependencia como los apoyos necesario que tendrá esa persona a lo largo de su recuperación o de su vida.
 
Identificar los dos grandes grupos de dependencias para una valoración eficiente
 
Dentro de los tipos de dependencia se pueden identificar dos grandes grupos valorar y a asistir. Las personas mayores es un sector importante de la población que suelen necesitar asistencia y determinar su grado de dependencia, para establecer los espacios y mecanismos para ser tratados y lograr que en su mayoría puedan ser siendo productivos para la sociedad, según sus capacidades y limitaciones. Para ellos el estado ha determinado espacios y propicia la especialización de profesionales en esta área para ser asistidos o tratados.
 
El segundo grupo a valorar dentro de los grados de dependencia son las personas con alguna discapacidad. Este puede ser el más amplio de los tipos de dependencia y cuenta con valoraciones específicas y en muchos casos muy complejas para poder brindar el apoyo necesario a estas personas. Entre estas discapacidades se encuentran aquellas que cuentan con la clasificación internacional de deficiencias, discapacidades y minusvalías (o CIDDM); se suman a ellos las personas con trastornos mentales (O DSM) y los cambios en el DSM 5; pacientes con discapacidad intelectual, trastornos del desarrollo intelectual, discapacidad psíquica, física o deficiencia motora, discapacidad sensorial, auditiva, visual o multisensorial.
 
Grados de dependencias según la Ley
 
La Ley De Promoción de la Autonomía Personal y Protección de Personas en Situación de Dependencia estableció dentro de estos grupos de dependencia como la discapacidad y los personas mayores, tres grados para lograr determinar el tipo de dependencia y posterior ayuda que puede brindar el estado. Estas valoraciones son también importantes dentro del ámbito profesional y laboral para activar mecanismos de ayuda que no aíslen por completo a estas personas.
 
La Ley establece tres tipos o grados de dependencia. Grado I es llamada dependencia moderada, cuando la persona requiere de asistencia o ayuda en su vida diaria pero no de forma permanente. Requiere el apoyo de un Asistente especializado en esta área para tareas muy específicas, que pueden ir desde el acompañamiento hasta el suministro de medicamentos. Todo dependerá del tipo de discapacidad que presente. Por el contrario el Grado II determina una dependencia severa, necesitando ayuda para realizar varias actividades básicas, entre dos y tres veces al día. Esto supone un apoyo permanente de un cuidador y necesidades de apoyo para su autonomía personal.
 
El último tipo de dependencia, es llamado Grado III, y se colocan en este grupo aquellas personas que requieren asistencia permanente para varias actividades, varias veces al día. Estas personas presentan pérdida total de su autonomía física, mental, intelectual  o sensorial. Estas personas son atendidas con prioridad al tratarse de mecanismos y procesos más complejos para tratar y asistir. Estas valoración son importantes pues de ellas dependen las empresas para saber tratar estos asuntos sanitarios con eficiencia, y para activar mecanismos de ayuda que son obligación de los gobiernos atender.
 
Cart
  • No products in the cart.